Para Semana Santa, Holland America ofrece un plan alternativo a la nieve y la montaña: un fantástico crucero de 11 noches a bordo del Noordam por las costas de Italia y de Dalmacia, pasando por algunas de las islas más bellas del Mediterráneo. El crucero parte de Civitavecchia (cerca de Roma) y finaliza en Venecia; hay tres fechas de salida: el 15 de abril para Semana Santa y, más adelante, el 29 de mayo y el 12 de julio. El precio base más barato se encuentra en los 799 euros en camarote interior, con un suplemento de 100 euros para quienes deseen camarote exterior.
El crucero parte del puerto de Civitavecchia para dirigirse hacia el estrecho de Messina y llegar a la ciudad homónima, en Sicilia, al mediodía del tercer día de viaje. Al día siguiente se hace escala en La Valleta, en la isla de Malta; y, tras un día de navegación, se llegan a las hermosas islas griegas: el quinto día toca Cefalonia y el sexto, la hermosa Corfú (de la que se dice que es una de las más bellas islas del Mediterráneo). Durante los cuatros días siguientes, el Noordam sube por la costa de Dalmacia haciendo escala en Kotor, Dubrovnik, la isla de Korcula y Split. Finalmente, al alba del undécimo día el barco llega a Venecia, donde permanecerá hasta el día siguiente, de manera que los pasajeros del crucero podrán dormir y comer a bordo hasta la mañana siguiente.
La época es la ideal para este viaje: dejando de lado el riesgo de mal tiempo, que por otra parte existe también durante el resto del año, la primavera es la época en la que se goza de unas mejores temperaturas en Italia y en la costa de Dalmacia. El tiempo se aprovecha todo lo que se puede, partiendo de los puertos por lo general después de las 5 de la tarde y sólo un día completo de navegación (durante el cual, por otra parte, se puede disfrutar de los entretenimientos que ofrece el Noordam). Por otra parte, la mayoría de los puertos se pueden visitar en un solo día (aunque tienen suficientes atractivos para más de uno) y, si uno lo desea, puede reservarse algunos días extra en Roma y Venecia, antes y después del crucero: de hecho, es recomendable hacerlo, si no se han visitado aún estas ciudades (o aun así, pues son el típico destino al que uno no se cansa de volver).