Aunque la naviera Crystal Cruises sea chino-malaya, surge en Japón como algo muy Zen y sereno, donde todo es una suave y clásica sinfonía. El Crystal Symphony es una apuesta que demuestra, que lo lujoso no debe ser siempre pequeño, sino tener el tamaño perfecto .Con la cuidada decoración de Robert Tillberg, el barco tiene un ratio espacio por pasajeros impresionante. Nunca te toparás con muchedumbres.
Con 68.879 toneladas, lleva solo 1080 pasajeros para una tripulación de 655 personas. El camarote más pequeño mide, ni nada menos que 21 m2, destacando los tres tipos de suites penthouse con detalles como: menús de almohadas, champagne francés, productos de belleza de marcas de lujo, prismáticos, mantas de cubierta de casimir, quimonos, paraguas, minibar gratuito. De sus 550 cabinas, 466 posee balcón. O sea un 85% del total.
Si en el restaurante principal la gastronomía es perfecta, podemos además disfrutar de cocina oriental galardonada de renombrados chefs como Nobu Matsuhusa del Silk Road, o el reputado Piero Selvaggio del distintivo e italiano Prego. En su impresionante Palm Court disfrutamos de una institución gastronómica. El Mozzart Tea, algo muy ceremonial, con los mejores dulces, y camareros ataviados con elegantes trajes de época.
Quizás con una de las mejores bibliotecas, ofrece también un impresionante programa de enriquecimiento personal: clases de piano, idiomas, informática, etc.
Instalaciones principales: Spa, gimnasio, simulador de golf, cancha tenis, Trident Grill, Palm Court, Lido Café, Bistro Montmatre, Galaxy Lounge, Hollywood Cinema, Casino, DeLuxe NightClub, tiendas, biblioteca, Startlite Club, Vintage Room, Silk Room & Sushi Bar, Prego, Connoisseur & Avenue Club, The Studio, Bar Crystal Cove, y Restaurante Crystal.