A lo largo de la historia, han sido mucho los buques de crucero que han quedado para el recuerdo, por su elegancia y sus características innovadoras en cada época. Algunos han llegado a ser tan famosos que al ser retirados de circulación han sido transformados en Hoteles de Lujo, fuera de lo común.
Es el caso del Queen Mary, que fue el trasatlántico más grande y lujoso de su época y que en 1967 se convirtió en Hotel en Long Beach California, conserva en su interior la decoración Art Deco que lo caracterizó y consta de 365 Suites.
El Buque Cruise Inn fue adquirido por el gobierno chino a finales de los 70, 10 años después quedo encallado,y se construyó alrededor de él la Plaza Sea View en Shenzhen. Lo remodelaron por completo y hoy en día tiene dos acuarios y habitaciones con tecnología moderna.
El Diamond Princess fue un barco de vapor construido en 1952 que transportaba el correo en las costas de Noruega, hace 5 años se trasladó a Olso para convertirse en hotel. Conserva la apariencia de un barco antiguo con piano-bar, biblioteca, brújulas y camarotes tradicionales.
El Queen Elizabet II, gran trasatlántico de Cunard, que durante 40 años navego por todos los Mares del Southampton a Nueva York y viceversa. La compañía Istithmar lo compró hace dos años por más de 100 millones de dólares para ser uno de los hoteles de máximo lujo en la Isla Palm Jumeirah.